Una madre primeriza puede llegar a ser una leona protegiendo a su hijo. Con una serie de emociones desenfrenadas a su alrededor, hay cosas que será mejor que no escuchen nunca. Las palabras pueden hacer mucho daño y si se refieren a un hijo mucho más. Para evitar herir la sensibilidad de las personas, generar un pequeño trauma o incluso provoca...
Si te gusto esta noticia puede que te interesen estas..