Pues nada, creo que el título lo dice todo. Qué idílico sería que un cartelito bastase para poder tener un poco de intimidad en el baño, ¿Verdad" Pero no, bienvenida maternidad, adiós a la privacidad.Creo que el primero en invadir mi espacio en el baño fue el gato que por las mañanas no tenia otra cosa que hacer que colarse en el bañ...
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