Ser madre es un punto de inflexión irremediablemente, ya que una vez que te conviertes en madre, quieras o no, tu vida cambia. No voy a decir que para bien o para mal, esto último espero que solo se piense en momentos de desesperación, simplemente tu vida pasa a ser diferente, por poderosas razones. Y es que tener un hijo no es pecata minuta, no...
Si te gusto esta noticia puede que te interesen estas..